El
Manifiesto de la Música Positiva
”La
música tiene encantos para apaciguan el seno salvaje,
para ablandar piedras, o doblar un roble nudoso.”
William Congreve
The
Mourning Bride Acto 1
Nosotros, los miembros del Movimiento de Música Positiva,
proclamamos el surgimiento de un nuevo movimiento artístico
para el siglo XXI basado en el propósito más alto del arte y
de la música: la expresión de la sanación, la elevación,
la espiritualidad y el amor. Los beneficios de la música han
sido largamente reconocidos en la terapia y la capacidad que
algunas músicas y canciones tienen para producir lágrimas,
risas e incluso tristeza han sido reconocidas desde hace mucho
tiempo. Un conocimiento más completo de los efectos que la música
puede tener en nuestras vidas ha sido poco comprendido.
Sin
embargo, las culturas antiguas conocieron estos efectos. Los
chinos supieron que alterando alguna sola nota de su escala de
cinco notas causarían un gran cambio en el efecto que esa música
tendría en la sociedad. Platón escribió acerca de los
efectos producidos por varias escalas. Los músicos de la
antigua India reconocieron los efectos de las escalas y la música
era compuesta con un propósito específico - emocional,
mental o físico - en mente. En Persia antigua, eruditos como
Farabi, Ormavi, Maraghi, Razi y Abu Ali Sina eran bien
versados en el efecto de la música y en su aplicación en la
terapia musical y trataron estos temas en sus escrituras.
Los miembros del Movimiento de Música Positiva creemos que ha
llegado el tiempo para una nueva dirección en la evolución
de la música, una dirección no asociada a cambios estilísticos
específicos, como hemos visto en movimientos del pasado, sino
asociados a la aceptación de lo que hemos aprendido y
apreciado del gran arte de todas las edades y culturas.
Las grandes obras de arte siempre
han provenido de una combinación de talento/genio y
desarrollo espiritual. Para que la grandeza se exprese a sí
misma en el siglo XXI, deben eliminarse los límites
artificiales de la conformidad a cierto estilo y al concepto
de una avant garde. Entonces la música y el arte serán
libres de ser aceptados por su capacidad de expresar lo que
todo gran arte expresa, en lugar de ser medido en conformidad
a, o por la originalidad de, un estilo particular. Vivimos en
un mundo que ha llegado a estar interconectado por una red
asombrosa de computadoras a través de la cual tenemos acceso
a información inimaginable para generaciones previas. Se
puede acceder a grandes avances artísticos usando Internet y
la tecnología de computadoras. Las antiguas formas de creación
y distribución de música y arte están siendo reemplazadas
ahora por los desarrollos de la gran tecnología de Internet,
que proporciona medios para distribución que nunca habían
estado disponibles en tiempos pasados. La Internet provee las
formas para que la gran música sea difundida a cualquier
lugar del mundo sin costos globales y de distribución
asociados a medios tradicionales.
Además, reconocemos que durante el siglo previo, muchísima música
de naturaleza negativa fue creada en los géneros populares,
clásicos y sagrados y que esta música ha logrado mantener su
influencia. Pero la tendencia a la disonancia, la negación de
la melodía, la fealdad y el enojo han alcanzado su pico,
sentimos, y muchas personas ahora buscan algo más substancial,
permitiendo que voces, nuevas y antiguas, ahora sean oídas.
Los miembros de este movimiento no apoyamos la prohibición ni
la condena a esta música, ni a la música de cualquier tipo,
ni actuaremos en oposición a ningún tipo de música.
No es trabajando en contra de viejas tendencias artísticas
como se crearán las nuevas, sino presentando algo tan grande
y poderoso, que su mera existencia atraerá naturalmente a las
personas. Apoyamos el traer obras maestras de belleza y
sinceridad a las salas de concierto y a los hogares de la
gente y sus lugares de trabajo. Apoyamos la distribución e
interpretación de obras musicales de culturas de todo el
mundo, tanto actuales como del pasado, tanto clásicas como
populares. Apoyamos la educación para brindar el conocimiento
de la gran música de todas las culturas y tiempos a personas
de todas las edades, a través del mundo.
Nosotros sostenemos que como el más alto propósito del arte
es darle su lugar merecido, la grandeza de la expresión artística
va a prosperar.
Firmado
por los Miembros del Movimiento de Música Positiva
Abril,
2004
(Traducción:
Diego Oscar Ramos)